VIENA.- Austria introducirá controles en sus fronteras si la Unión Europea (UE) no logra impedir la entrada de miles de refugiados que desde ayer intentan entrar a Grecia desde Turquía, advirtió este sábado el canciller, Sebastian Kurz.
«Estamos en continuo contacto con nuestros socios en la UE y a lo largo de la ruta de los Balcanes Occidentales. Si la protección de las fronteras exteriores de la UE no tiene éxito, Austria protegerá sus fronteras», dijo el jefe de Gobierno en un comunicado.
Kurz aludía así a la tensa situación que hay ahora en la frontera turco-griega, después de que Ankara anunciara que, ante la actual escalada de la violencia entre su ejército y las fuerzas de Damasco en Siria, no iba a impedir el paso de migrantes a Europa, como ha hecho en los últimos años en cumplimiento de un acuerdo con la UE.
Desde ayer miles de refugiados se han trasladado desde diversas partes de Turquía hasta las zonas fronterizas con Grecia con el objetivo de llegar hasta territorio comunitario, en un movimiento que Atenas consideró hoy orquestado.
Según fuentes oficiales griegas, al mediodía del sábado había ya unas 7.000 personas esperando con la esperanza de cruzar a Europa.
El portavoz del Gobierno griego, Stelios Petsas, aseguró este sábado que en las últimas horas se han impedido «más de 4.000 entradas ilegales al país», con lo que se ha evitado «un intento masivo y organizado de violar la frontera».
Se «hará lo que sea necesario» para salvaguardar las fronteras griegas y europeas», declaró.
Las cifras manejadas por el Gobierno heleno contrastan con el número de 18.000 que mencionó hoy en Estambul el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
«¿Así, qué hicimos ayer? Abrimos las fronteras. Hasta esta mañana hay unos 18.000 que están cruzando, forzando el paso fronterizo, pero hoy mismo pueden llegar a ser 25.000 o 30.000», afirmó el mandatario.
Erdogan relacionó el cambio en la política migratoria con el apoyo en armamento y material que, a su juicio, muchos países han prestado a las milicias kurdas en Siria o al propio régimen de Damasco, pero sin respaldar a Turquía, que acoge a unos 3,5 millones de refugiados sirios.
«A partir de ahora ya no cerraremos la frontera. Esto continuará pasando. ¿Por qué? Porque Europa debe cumplir su palabra. No estamos en condiciones de atender y alimentar a tantos refugiados. Si sois sinceros, debéis participar en esto; si no, dejaremos las fronteras abiertas», dijo el presidente dirigiéndose a la Unión Europea (UE).
EFE
Austria controlará sus fronteras si la UE no para la llegada de refugiados
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad