ANKARA- El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, anunció este lunes algunos alivios de las restricciones ante el coronavirus, al tiempo que declaró un toque de queda de cuatro día a partir del próximo sábado para ralentizar la propagación de la pandemia.
El mandatario subrayó la importancia de limitar al máximo los contactos sociales y pidió a la ciudadanía «no alimentar al virus» saliendo sin necesidad.
Al mismo tiempo, sin embargo, se seguirá relajando la medida de aislar las ciudades más pobladas del país y prohibir los viajes interurbanos, tomada hace tres semanas.
Los mayores de 65 años, confinados en casa desde hace un mes y medio, podrán salir el próximo domingo durante seis horas, mientras que el resto de la población permanecerá encerrada, y los menores de 20, ahora también sometidos al toque de queda continuo, podrán salir durante dos días de la semana que viene.
EFE