(Madrid, 29 diciembre de 2020).- El presidente del Gobierno español,  Pedro Sánchez, anunció este martes que la Corona va a emprender «paso a paso» el camino de renovación en cuanto a «transparencia y ejemplaridad», en línea con las medidas adoptadas por Felipe VI desde que comenzó su reinado, en junio de 2014, y garantizó al rey «todo el apoyo» del Ejecutivo en esa dirección.

En conferencia de prensa, Sánchez  aplaudió el discurso que el rey de España pronunció en Nochebuena, en el que «marcó claramente el rumbo hacia el que quiere dirigir la Corona», que es «una monarquía parlamentaria, constitucional y adecuada a la España del siglo XXI», dijo el gobernante, aunque no concretó si el Ejecutivo planea una ley sobre la institución.

«Paso a paso irán conociendo cómo se materializa la hoja de ruta que señaló el rey de renovación de la Corona en cuanto a la transparencia y la ejemplaridad», explicó Sánchez ante la prensa para informar sobre el primer año del gobierno que dirige, una coalición entre los socialistas y los izquierdistas de Unidas Podemos, muy críticos estos últimos con la Corona.

Subrayó que el Gobierno «respeta, está de acuerdo, comparte y defiende el pacto constitucional y la monarquía parlamentaria», establecida en la Constitución vigente (1978), y garantizó «todo el apoyo» a los pasos que el Felipe VI vaya a dar en el futuro sobre esta cuestión.

El jefe del Ejecutivo compartió las palabras del rey de que la renovación tiene que estar vinculada a «la transparencia, la rendición de cuentas y la ejemplaridad».

El discurso de Nochebuena del monarca fue «valiente», en opinión de Sánchez, al trazar el camino para el futuro.

En su mensaje navideño, Felipe VI no hizo mención directa al caso de Juan Carlos I, su padre, investigado por la Fiscalía del Tribunal Supremo por presuntos negocios ocultos en el extranjero, pero afirmó que «los principios éticos y morales deben estar por encima de consideraciones familiares».

Recientemente, el 9 de diciembre, el rey emérito de España abonó a la Hacienda española 678.393,72 euros, incluidos intereses y recargos, mediante una declaración tributaria «sin requerimiento previo». EFE