Nueva Delhi, 26 marzo, 2021).- Campesinos en toda la India marcaron este miércoles con una «jornada negra» de protestas los seis meses de rechazo a tres leyes agrarias que buscan liberalizan el sector, mientras el país sigue sumido en una virulenta segunda ola del coronavirus.
Los campesinos protestaron desde los balcones de sus hogares y en varios puntos del país se realizaron «pequeñas reuniones para izar banderas negras» en señal de oposición a la reforma agraria, afirmó a Efe Avil Saha, secretario del sindicato AIKSCC, uno de los convocantes.
«No es una manifestación en las calles», aclaró Saha.
Esta jornada de protestas se extendió por más de diez mil puntos de la geografía india, explicó, incluyendo las acampadas permanentes que reúnen a unos 50.000 campesinos en varias entradas a la capital india desde el pasado 26 de noviembre, donde se permanecen instalados con tractores, camiones y tiendas de campaña.
La India continúa sumida en una segunda ola del coronavirus y este miércoles superó los 27 millones de infecciones desde el inicio de la pandemia, aunque Saha aseguró que el virus no ha impactado de forma significativa las acampadas.
«Algunas personas han tenido el coronavirus, pero no son tantas como cabía esperar incluso en las condiciones en las que están establecidos. Ha habido muertes, unas 3 o 4 personas han fallecido», afirmó.
Las televisiones locales mostraron a agricultores en reuniones masificadas sin respetar la distancia de seguridad y, en ocasiones, sin llevar puesta la mascarilla.
En el origen de estas protestas está una reforma legal que según los campesinos sienta las bases para que deban vender su cosecha directamente a las empresas dentro de la cadena de distribución, algo que, dicen, los pone en desventaja, al tener que hacer frente así a la incertidumbre de las fluctuaciones del libre mercado.
Desde el Gobierno, sin embargo, aseguran que mantendrán el MSP (el Precio Mínimo de Apoyo) que subvencionan en 22 cultivos, y que solo variará el precio final si éste beneficia al campesino. EFE