Las abogadas y abogados de Venezuela celebran su día cada 23 de junio, después de la formalización de esta fecha a lo largo del primer lapso presidencial de Rafael Caldera en 1972, y en conmemoración al primer Mandatario constitucional de la República de Venezuela en 1811, Don Cristóbal Robado de Mendoza, quien fuera conocido por su destacada tarea como jurista y amigo del Libertador Simón Bolívar.
No obstante, esta profesión ya contaba con un colegio a partir de 1788, cuando fue fundado el Ilustre Colegio de Abogados de Caracas. Además, asesora y da consejo en materias jurídicas, para el ejercicio de esta profesión se requieren estudios universitarios de Derecho (licenciatura en Derecho), además de estar inscrito en la escuela de abogados o tener una autorización del Estado para ejercer.
Cada 23 de junio se festeja en Venezuela el Día del Jurista por idea de la Federación de Colegios de Abogados de Venezuela.
Este hombre conformado en el campo de las leyes ocupó destacados cargos en el territorio como el de primer mandatario constitucional de la República de Venezuela en el año de 1811 y fiel camarada de peleas del Libertador Simón Bolívar.
Esta profesión tiene implícita una gigantesca responsabilidad de ser garantes y defensores de los derechos de los habitantes, de ser fieles ayudantes de la justicia y velar por ella, con un alto espíritu social, ético y moral.
Un jurista debería luchar por el respeto de los derechos de los habitantes y por la justicia, defendiendo casos complejos por medio de fuertes argumentos que demuestran en juicio ser el que tenga el motivo, contribuyendo con un gran aporte a la sociedad, debido a que una sociedad sin leyes no podría subsistir y es funcionalidad de los abogados impulsar y conservar la convivencia ciudadana.
