(Buenos Aires, 7 de agosto de 2021.EFE).- El Ministerio de Salud argentino notificó este sábado 9.803 nuevos casos del coronavirus SARS-CoV-2.
El número total de positivos ascendió a 5.012.754, mientras los fallecimientos se elevaron a 107.302 tras ser reportadas 89 muertes en el último día.
Argentina registró un récord diario de casos el 27 de mayo último, al reportarse 41.080 contagios.
Mientras que el mayor número de muertes en una sola jornada se verificó el pasado 21 de junio, con 792 fallecimientos ese día.
En la provincia de Buenos Aires se contabilizaron este sábado 2.343 casos, en Corrientes (noreste) 1089.
En la central provincia de Córdoba se relevaron 1.075 positivos, y en la capital del país 642 casos.
De acuerdo con el informe oficial, hay 4,66 millones de pacientes que ya han sido dados de alta.
Hasta el momento, en el país suramericano se han realizado 20 millones de test, de los cuales 84.899 se realizaron este sábado.
Argentina experimentó en abril y mayo un acelerado aumento de los casos de covid-19, con un alto nivel de ocupación de camas en las UTI.
Aunque la curva ascendente de positivos comenzó a ceder en junio, tras la aplicación de nuevas restricciones sanitarias.
El país suramericano luego determinó un cupo diario de viajeros argentinos y residentes que pueden ingresar al país.
Que desde este sábado se amplía a 1.700 por día, para retrasar el ingreso de la variante delta.
Al tiempo que busca dejar atrás la segunda ola de covid-19, Argentina, con unos 45 millones de habitantes, continúa con su campaña de vacunación.
Se inició a finales de diciembre pasado y con el objetivo de lograr completar en agosto el esquema de vacunación en la mayor cantidad de personas posibles.
Según datos oficiales difundidos este sábado, hasta el momento se han aplicado 34,21 millones de dosis.
Un total de 25,97 millones de personas recibió la primera dosis de la vacuna, mientras que 8,2 millones de personas fueron inoculadas ya con la segunda dosis.
Argentina anunció esta semana que comenzará a combinar vacunas de distintos laboratorios, a partir de las demoras en la llegada de dosis del segundo componente de la vacuna rusa, que de momento, se intercambiarán con las desarrolladas por Moderna y por AstraZeneca.
Este viernes la ciudad de Buenos Aires comenzó la aplicación de la vacuna de Moderna a los adultos mayores que habían cumplido el plazo de tres meses desde que se vacunaron con el primer componente de Sputnik V.
