(Islamabad, 2 noviembre, 2021).- Pakistán reabrió este martes su segundo paso fronterizo más grande con Afganistán, que los talibanes habían cerrado hace casi un mes culpando a Islamabad por sus duros requisitos de entrada, cerca de dos semanas después de haber permitido el tránsito en el cruce más importante entre ambos países.
«La frontera abrió para el movimiento normal de mercancías y personas a las ocho de la mañana», dijo a Efe Abdul Ghani, un oficial de seguridad del paso de Chaman, en la provincia sureña paquistaní de Baluchistán.
Según Ghani, la reapertura del cruce tuvo lugar tras una reunión ayer entre las autoridades fronterizas de Pakistán y del Gobierno interino de los talibanes.
«Las autoridades afganas retiraron los bloques de cemento que habían colocado ante las puertas el 6 de octubre (…) al afirmar que sus ciudadanos estaban sufriendo dificultades al cruzar la frontera, algo que Pakistán niega», añadió el oficial de seguridad.
El paso de Chaman en el lado de Pakistán, y Wesh del lado afgano, es el segundo punto de cruce más grande entre los dos países y proporciona un acceso a Afganistán, sin salida al mar, hasta el puerto marítimo paquistaní de Karachi.
Pakistán cerró en primer lugar el paso de Chaman el pasado mayo para limitar la difusión del coronavirus, aunque la frontera siguió abierta para la circulación de camiones de mercancías y para el retorno de los ciudadanos afganos y paquistaníes a sus respectivos países.
Los talibanes capturaron luego el paso días antes de tomar el control de Kabul el pasado 15 de agosto, y fue reabierto temporalmente hasta principios de octubre, cuando los fundamentalistas decretaron de nuevo su cierre.
Islamabad reabrió el 22 de octubre el paso fronterizo de Torkhan, el más importante entre ambos países, tras una visita paquistaní de alto nivel a Kabul. EFE
