(Berlín, 10 de diciembre de 2021. (EFE).- Alemania ha acelerado la campaña de la vacunación, especialmente en lo que se refiere a la dosis de refuerzo, mientras la incidencia de contagios refleja un descenso leve, pero continuado.
El viernes se superó, por cuarto día consecutivo, el millón de dosis administradas -1,05 millones-, unas 915.000 de las cuales fueron de la denominada dosis «booster», según las cifras actualizadas hoy por el Instituto Robert Koch (RKI) de virología.
El porcentaje de ciudadanos con la pauta completa es del 69,5 % y el de quienes recibieron además esa dosis de refuerzo subió al 22,5 %.
Del 27,5 % de los que siguen sin haber recibido ninguna dosis, un 4,8 % corresponde a niños hasta los cuatro años, para los que no hay ninguna vacuna autorizada.
Se espera que se active la campaña entre los menores de entre 5 y 11 años, después de que el jueves la Comisión Permanente de Vacunación (Stiko) recomendara la vacuna para este grupo entre quienes tengan patologías previas.
La puerta está abierta, asimismo, «en base a deseos individuales», según la recomendación de Stiko, que además aconseja vacunar a los niños de esas edades en cuyo entorno haya personas vulnerables.
La incidencia acumulada por siete días se sitúa ahora en 402,9 casos por 100.000 habitantes, según las cifras actualizadas este sábado por el RKI. El viernes el nivel era de 413,7 contagios, mientras que hace una semana estaba en 442,7.
El número de fallecidos con o por la covid-19 en las últimas 24 horas se eleva a 510, lo que sitúa el total de víctimas mortales en toda la pandemia en 105.505 personas.
El gobierno del socialdemócrata Olaf Scholz, al frente de una coalición con verdes y liberales, ha puesto en marcha el plan para proceder a la vacunación obligatoria del personal sanitario y de residencias de ancianos.
El viernes, las dos cámaras del Parlamento -el Bundestag y el Bunderat- aprobaron el correspondiente proyecto de ley para implantar la vacuna obligatoria en estos sectores laborales sensibles o en contacto con personas vulnerables.
Dispondrán estos profesionales hasta marzo de 2022 para presentar el correspondiente certificado. Scholz defendió este plazo -demasiado amplio, en opinión de los poderes regionales- por el hecho de que hace falta tiempo para recibir la pauta completa y tener el máximo nivel de inmunidad.
La ley contempla que las dosis puedan ser suministradas en farmacias o por parte de dentistas y veterinarios que cumplan con determinados requisitos, durante un periodo de tiempo limitado.
El nuevo Gobierno trabaja además en un marco legal para la introducción de la vacuna obligatoria de modo generalizado, con el objetivo de tenerlo listo para entrar en trámite parlamentario hacia febrero.