(Margarita, 12 de Julio, 2022). Cada uno tiene su idea de cómo es esta isla, su geografía, su topografía, su toponimia, historia, desarrollo, entre otras cosas. En fin, le hemos puesto etiquetas y damos por sentado que así es.
O eso hice yo, caraqueña de origen con más de treinta años viviendo en la isla, llegué, puse las etiquetas y con ellas me quedé. Y por esa razón no soy una buena margariteña, ni siquiera merezco “la visa y pasaporte ñero”.
Soy una más de los que, buscando refugio y calidad de vida, se vinieron para acá pero no hicieron espacio para la isla. Traje a Caracas conmigo, traje mis tradiciones, mis ideas y no hice nada por ir más allá.
Así que hecha esta confesión, a modo de prólogo y curriculum, aprovecho la oportunidad que me brinda este medio para compartir con ustedes lo que estoy aprendiendo de la mano de otro caraqueño, que decidió traer su vida a Margarita y hacer de la isla su vida.
El es David Bottome y de sus andanzas y descubrimientos de la isla, sobre la isla y alrededor de ella, junto a sus compañeros de viaje, margariteños de primera, patrimonio inmaterial, historiadores, arqueólogos, pescadores, cocineras, empanaderas, exploradores, amigos entrañables y su profundo amor por la aventura y el mar; de todo esto escribiremos en este espacio.
Espero les guste, y la próxima vez que vengan vean nuestra isla con otra mirada.
Redacción: María Dolores Sole
Fotos: David Bottome, @retocaribe