(Caracas, 19 septiembre, 2022. Redacción: Daniela Brito).- La semana pasada llegaron autobuses con migrantes indocumentados a las puertas de la residencia de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, en Washington.
Frank Chirinos, migrante venezolano que fue enviado a la residencia de Kamala Harris expresó que su destino final era Washington pero «nunca pensó llegar en un autobús a la casa de la vicepresidenta».
El migrante aseguró que siente que esta estrategia «es una jugada política contra el presidente Joe Biden».
«Cuando entré en territorio estadounidense, nos recibió una autoridad en Texas en un refugio y nos enviaron a New York y de allí nos enviaron a Washington» dijo.
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Además, Chirinos destacó que «en el Río Bravo nos recibieron de madrugada los militares estadounidenses, nos quitan las pertenencias y nos hacen llenar nuestros papeles».
«En el refugio estuvimos detenidos 2 días para sacar nuestros papeles de forma un poco más legal» acotó el migrante y relató que les comentaron que «había viaje para Chicago, un viaje para NY y un viaje para Washington y que todo iba a ser gratis».
El venezolano resaltó que en el momento que los dejaron cerca de la casa de Kamala Harris «no se les informó a dónde irían, qué harían» y no fueron llevados al refugio como les comentaron.
También comentó que «era un grupo de 50 venezolanos dejados en Washington, de ahí a todos nos tocó llamar a contactos para que nos acogieran».
Chirinos partió de Venezuela en 03 de agosto, el hombre que se desempeñaba como policía en el país pasó por la Selva de Darién para llegar a EEUU y expresó que «la selva es peligrosa, vimos el cadáver de un niño de 2 meses que murió en los brazos de su padre».
