(Caracas, 5 de octubre de 2022. Redacción: Melany Garcés).- El sábado 1 de octubre, La Vida Bohème se presentó en el Anfiteatro El Hatillo para finalizar su Último Round Tour por Venezuela, como parte de la gira producida por Cusica. El Team Mega estuvo presente desde temprano para hacer una transmisión especial en el concierto.

Si no pudiste ir al show de esta legendaria banda venezolana, ¡acá te contamos todo!

Desde las 4 pm hasta las 7 pm, realizamos una transmisión especial con Humberto Turinese, Oscar Martínez y Lorenzo Martinez. Mientras la prueba de sonido se llevaba a cabo, los locutores conversaron con Yiyi, Sebastián «Chevy» Ayala, Antonio Romero y María Fernanda Burbano sobre sus expectativas para el show y de los fans que son de la banda.

Primero, La Vida Bohème probó sonido y sus visuales. Desde ese momento, todo el Team Mega se dio cuenta de que iba a ser un gran evento repleto de canciones icónicas de la banda. Luego, Gran Radio Riviera, agrupación que se encargó de abrir el espectáculo, estuvo probando sonido.

Al mismo tiempo que las bandas venezolanas se preparaban, los fans ya estaban haciendo la cola fuera del Anfiteatro, desde antes de las 2 pm. La emoción de la gente era inigualable. Había personas con merch, increíbles outfits y carteles que decían frases como «Chevy, dame tu baqueta o si no, un pelo de tu bigote».

@lamega107

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Inicio del show

El show comenzó con la presentación de Gran Radio Riviera. La banda tocó canciones como “La De Llamarte”, “Impaciente”. Asimismo, estrenaron en vivo su más reciente sencillo “Omae Wa”, canción que todo el público disfrutó demasiado por su sonido post punk y porque Juan Velasco recorrió los asientos del Anfiteatro mientras interpretaba “Omae Wa”.

Antes de que tan esperada La Vida Boheme se subiera al escenario, llovió muy fuerte, lo que generó un pequeño retraso. Aún así, los fans estaban más animados que nunca, pues el DJ ponía temazos como “Neverita”, “Ojos Marrones”, “Verónica”. Así, el público tenía más ganas de escuchar a la banda. A las 8:40 pm, La Vida Boheme comenzó su show en Caracas con “El Paraíso Perdido”, canción que hizo que demasiadas personas estuvieran eufóricas.

La tan esperada banda venezolana inició tocando temas de sus anteriores discos como “Calle Barcelona”, “Hornos de Cal”, “Voce” y “Flamingo”. Esto hizo que los fans que tienen tiempo siguiéndole la pista a La Vida Boheme perdieran la cabeza y las cuerdas vocales. Pues, a veces el público cantaba más alto que Henry D’Arthenay. Y no solo se disfrutó de los viejos temas, sino también tocaron canciones de sus nuevos EPs como “Control” y “Último Round”.

Los fanáticos se peleaban por estar en primera fila, tanto así que había una gran cantidad de personas a los pies de Henry. La locura de la gente por escuchar a La Vida Boheme se resumía en muchísimo sudor, saltos, manos al aire y demasiada euforia. Así, cuando finalmente tocaron “Radio Capital”, los gritos del público retumbaban en todo el Anfiteatro El Hatillo.

En este cúmulo de personas, Henry se estuvo acercando constantemente para darles la mano. Vale resaltar que a lo largo de todo el performance, la presencia e interpretación de Henry siempre estuvo on point. Con cada canción, se nota su emoción por volver a tocar en Caracas. Asimismo, el baterista Chevy se gozó todo el show, pues su cara lo decía todo. Mientras tanto, el bajista Monno lanzaba agua de su botella a las primeras filas. 

Los momentos más icónicos del show fueron los siguientes: cuando subieron a una fan para interpretar “Lejos” con Henry; cuando se tocó “Nicaragua” (tema que hizo llorar a más de uno); y cuando llegaron a deslumbrar con “El Zar”, pues los gritos y la emoción era incontrolable.

Final del show

Los fans no querían que este show terminara. Todos querían seguir gritando cada canción, llorando, bailando y disfrutando a mil. Sin embargo, ya a las 10:20 pm llegaba la hora de que culminara el show y así fue cómo La Vida Boheme cantó “La Vida Mejor”. Entre abrazos, lágrimas y sudor, todos bailaban este tema parte de su disco “Será”.

Cuando Henry, Monno y Chevy terminaron la canción, se acercaron al filo de la tarima para hacer una reverencia a su público caraqueño. En este momento, Chevy tiró sus baquetas y Henry lanzó la uña de su guitarra. Y aunque las personas querían que se tocara otra canción, la banda se despidió muy agradecida.

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