(Lima, 9 de enero de 2022. EFE).- El aeropuerto que sirve a la ciudad andina de Ayacucho, en el sur de Perú, suspenderá este martes sus operaciones como medida preventiva ante las protestas antigubernamentales que sacuden el país tras la tregua navideña, y se suma al también sureño de Juliaca, cerrado el pasado viernes, informaron este lunes fuentes oficiales.
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones anunció a través de Twitter que, «como medida de prevención, el Aeropuerto de Ayacucho, Coronel Alfredo Mendívil Duarte, suspenderá temporalmente sus operaciones desde el martes 10 de enero«.
Fuentes de la cartera detallaron a EFE que la medida se tomó con el objetivo de salvaguardar la seguridad de los usuarios y trabajadores del aeropuerto, así como las propias instalaciones, ante el paro convocado para el martes en la ciudad de Ayacucho.
Según los convocantes, la protesta se extenderá hasta el miércoles, según un comunicado difundido por el Ministerio Público que exhortó a los ciudadanos a manifestarse de «forma pacífica, sin perturbar el orden interno, con estricto respeto de la propiedad pública y privada, y sobre todo la integridad y la vida humana».
El de Ayacucho será el segundo aeropuerto del país cerrado por motivo de las protestas antigubernamentales que se retomaron la semana pasada en Perú, luego de que el último viernes se suspendieran las operaciones del aeropuerto Inca Manco Cápac de Juliaca, también en el sur del país.
¿Por qué protestan en Perú?
Tras una tregua por Navidad volvieron de forma mucho más tímida y concentrada en el sur del país, las manifestaciones piden la renuncia de la presidenta Dina Boluarte, el cierre del Congreso, adelanto de elecciones generales a 2023 y la convocatoria de una asamblea constituyente, entre otras demandas.
En diciembre pasado, cuando arrancaron, las protestas se cobraron la vida de 28 personas en apenas 20 días. Diez de ellos fallecieron en Ayacucho, cuando un grupo de manifestantes trató de ingresar al aeropuerto.
A lo largo de diciembre, los manifestantes trataron de tomar varios aeropuertos, entre ellos el de Juliaca, lo que derivó en el cierre durante varios días de algunos de ellos.
Las protestas en Perú comenzaron luego de que Boluarte asumiera por sucesión constitucional la Presidencia del país tras la destitución de su predecesor, el exmandatario Pedro Castillo, quien hoy cumple una orden de prisión preventiva por intentar cerrar el Legislativo, intervenir en la judicatura y gobernar por decreto.