(Quito, 9 de agosto de 2023 – MundoUR).- El candidato presidencial en Ecuador Fernando Villavicencio, quien fue asesinado la tarde de este miércoles a la salida de un mitin político al norte de Quito, fue un periodista y activista político.
Nació el 11 de octubre de 1963 en el cantón Alausí, en la provincia de Chimborazo y su título de tercer nivel fue otorgado por la desaparecida Universidad Cooperativa de Colombia del Ecuador.
Villavicencio fue sindicalista en PetroEcuador y despedido en 1999. Trabajó en el portal Periodismo de Investigación hasta antes de entrar en la Asamblea Nacional de su país entre 2021 y 2023, cuando alcanzó un curul por la Alianza Honestidad, pero luego se declaró independiente.
Colaboró con varios medios como El Universo y la extinta revista Vanguardia. Además, se desempeñó como asesor del Pachakutik, Cléver Jiménez, electo por la provincia de Zamora Chinchipe en los períodos 2009-2013 y 2013-2017.
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El portal El Comercio recuerda que en 2014, Jiménez y Villavicencio estuvieron presos por 18 meses por presuntas injurias contra el entonces presidente Rafael Correa y estuvo prófugo de la justicia por tres años.
El 20 de septiembre de 2017, a pocos días de su llegada, Fernando Villavicencio fue a la Fiscalía a presentar una denuncia por presunto mal uso de recursos públicos, en la comercialización de crudo entre Ecuador y la empresa privada Petrochina. También denunció el caso Sobornos 2012- 2016, conocido como Arroz Verde.
En octubre de 2020, anunció su candidatura a la Asamblea Nacional y ganó.
Durante sus dos años como diputado, hizo varias denuncias contra políticos afines a Correa. Incluso, denunció presuntos nexos entre el empresario de origen colombiano Alex Saab y la senadora Piedad Córdoba.
Entre sus propuestas de gobierno estaba que, a través de la Unidad de Análisis Financiero (UAFE), se investigara e identificara a políticos, fiscales y jueces que no pudieran justificar sus bienes; los cuales pasarían al Estado si no se probaba su procedencia.
Buscaba fortalecer las capacidades y profesionalización de la Policía, así como la mejora de su entrenamiento y armamento; la cooperación internacional; reducir la impunidad en delitos contra la vida, combatir delitos ambientales, un mayor control de las fronteras; fortalecimiento de relaciones con EEUU para enfrentar al crimen organizado y reforzar mecanismos para mantener el dólar.
Con información de GK / La República / El Comercio / Bloomberg /
