(Caracas, 16 de febrero, 2024).- El canciller, Yván Gil, anunció el pasado jueves la suspensión de las actividades de la oficina técnica del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas en Caracas, pidiendo a su personal abandonar el país en un lapso de 72 horas.
El analista y experto en derecho internacional Mariano de Alba señaló que aún no se conoce si la salida va a ser concretada «porque no están claros los términos del comunicado, o si solo se trata de una especie de amenaza para que la oficina se retracte de las declaraciones que hizo con respecto a la detención de Rocío San Miguel».
Estudió que en caso de que se «cristalice la amenaza, Venezuela va a estar en una peor posición de promover y proteger los derechos humanos».
Señaló que principalmente la instalación la oficina técnica del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas en Caracas se dio por algunas faltas por parte de Venezuela en los materia de DD.HH.
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El abogado recordó los esfuerzos bilaterales para la instalación de la oficina en Venezuela, que tenía como objetivo principal, prestar asesoría técnica al Gobierno de Venezuela, «para el respeto de los derechos humanos».
