(Caracas, 20 de septiembre de 2024).- En vísperas del comienzo de un nuevo año escolar, descubrimos, a través del testimonio de tres madres en distintas etapas de la escolaridad, cómo es para ellas el regreso a clases.
Andreína Bringas, psicóloga y mamá de una niña de 18 meses, recordó que desde pequeña Paulina, su hija, ha sido muy independiente.
Destacó que ha estado aplicando sus conocimientos de psicología tratando los apegos de la manera más segura posible, ya que aseguró que es lo mejor que se le puede dar a los hijos.
«Ha sido costoso, es una inversión porque el desarrollo neurocognitivo es muy importante. Es muy difícil dividirse en todas las tareas y cumplirlas todas al 100%» añadió.
Respecto al uso de los dispositivos, Bringas indicó que procura que su hija lo use al mínimo, solo media hora al día.
«Se logra cumplir con todas las actividades siendo mamá trabajadora, pero se requiere mucha organización y mínimos tiempos de descanso» dijo.
Por su parte, Katherine Romero, abogada y mamá de un niño en 2do grado, resaltó que ella empezó a trabajar cuando este tenía 6 meses, por lo que inició en el maternal muy pequeño.
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Señaló que en segundo grado se ven los beneficios de haber empezado a temprana edad la escolaridad, ya que es un niño muy independiente.
«Todos los días hay miedos nuevos, pero los miedos de adaptación ya pasaron. Tengo muy regulado el contenido y las horas de uso de las pantallas, sin embargo, explicó que al ser estas de uso constante para las actividades del colegio, quiere que este se adapte al uso» acotó.
Corina Nadal, especialista en el área de seguros y mamá de una niña en 4to año bachillerato, los miedos son otros y están relacionados al bullying, las drogas y el futuro académico.
«Para mi hija su teléfono es una extensión de su brazo, el uso de este se incrementó en vacaciones, pero al volver a la rutina tiene tantas actividades que el uso se autoregula» explicó.
Para Nadal, la comunicación ha sido fundamental para poder criar a su hija y hablarle sobre los peligros de redes sociales.
