(Caracas, 27 de enero de 2025. Redacción por: Samantha Pacheco).- En un mundo donde se glorifica la dedicación absoluta al trabajo, y más cuando se trata de un trabajo que va con tu estilo de vida y valores, reducir la productividad puede resultar una contradicción. Sin embargo, estudios demuestran que incluso los trabajos más apasionantes pueden afectar el bienestar físico y mental cuando no se establecen límites claros entre la vida laboral y personal.
La psicóloga clínica Rosa Pellegrino nos amplió detalles sobre este tema:
“Si es verdad que hay trabajos en los que las personas se sienten satisfechas, plenas, donde las personas sienten que están haciendo algo que tiene sentido con sus valores y que están aportando a la humanidad, pero ocurre que cuando no se dan cuenta que existe una línea delgada entre dedicarse al trabajo por amarlo y la explotación moderna, empiezan los problemas”.
Estar casados con el trabajo
“Cuando tú piensas en una persona exitosa o que la gente depende de ella, tú piensas en alguien que está ocupado con reuniones y tareas. Esa es nuestra visión de alguien exitoso, alguien imprescindible, y eso es caer en un error”.
Según Pellegrino, estar casados con el trabajo puede ser una manera de evadir la realidad porque te refugias en las tareas y eso puede ser perjudicial porque te lleva a sacrificar tiempo de ocio, familia y amigos.
También te puede interesar: ¿Cuáles son las recomendaciones para invertir en este 2025?
Las recomendaciones son escuchar el cuerpo, permitirse parar para evitar el “burnout” o Síndrome del Desgaste Profesional, un padecimiento que se refiere a una respuesta prolongada al estrés ante factores en el trabajo.
