(La Guaira, 12 de marzo de 2025. MundoUR).- En un desgarrador relato, Arantxa Marcano, tía de la bebé prematura Mía Victoria, quien falleció en el Seguro José María Vargas, compartió su experiencia en Shirley Radio, revelando las circunstancias que rodearon la tragedia familiar.
Un parto complicado
Arantxa comenzó narrando cómo el pasado jueves llevaron a la madre de Mia Victoria, Hillary Tovar, al seguro para realizarse unos exámenes. «Los médicos dijeron que le faltaba líquido amniótico, pero la máquina estaba obsoleta y no pudieron hacer un diagnóstico adecuado«, explicó.
Ante la falta de atención, decidieron trasladarse a la maternidad de Macuto, donde los médicos aseguraron que todo estaba bien. Sin embargo, el viernes, la situación cambió drásticamente.
«Nos dijeron que había que intervenir el parto porque estaba seca y corría riesgo de infectarse», relató Arantxa.
A pesar de no tener antecedentes de complicaciones, la decisión fue tomada en medio del pánico familiar en el Hospital José María Vargas del Seguro Social de La Guaira.
La soledad en el parto
El día del parto, Arantxa contó que Hillary se encontró sola en el área donde descansaba. Así, a las 5:10 de la mañana, la tía cuenta que Hillary dio a luz sin la asistencia necesaria.
«No había ginecólogo ni doctora presente. Solo un enfermero que le dijo que dejara a la niña porque estaba muerta«, recordó con tristeza.
Cuando la familia llegó al hospital, se encontraron con la devastadora noticia de que Mía Victoria había fallecido. «Nos dijeron que estaba bien, que estaba tranquila, y nos sorprendimos al enterarnos de lo ocurrido», comentó Arantxa.
La revelación en la morgue
La situación tomó un giro inesperado cuando el padre de la bebé, al visitar la morgue, descubrió que Mía Victoria estaba viva.
«Cuando la sacaron de la cava, empezó a llorar y a moverse«, relató Arantxa conmovida. «Era un reflejo de vida, pero ya había pasado demasiado tiempo sin la atención adecuada«.
Lucha por justicia
Tras la denuncia presentada por la familia, el Ministerio Público detuvo a la ginecobstetra del hospital Deyanira Villegas. Arantxa enfatizó la necesidad de justicia.
«Esto no nos devolverá a la niña, pero no podemos permitir que quede impune. Queremos que se haga justicia por Mía Victoria y por otros niños que podrían haber pasado por lo mismo».
La familia enfrenta un dolor inimaginable, con Hillary luchando contra un profundo duelo. «Ella dice que se siente muerta en vida. Es un luto que no se merece», concluyó Arantxa.
