(Caracas, 6 de julio de 2025 – MundoUR).- El arzobispo emérito de Caracas, cardenal Baltazar Porras, preside la misa de este domingo en la que llama a la reflexión sobre la esperanza, que es la fe de lo que no se ve. Aspiraciones, sueños y proyectos se pueden pensar, pero hay que trabajar por ello.
«La esperanza está en lo que uno pone, hay que hacerlo con entusiasmo. Y se hace como creyentes, no para sentirnos mejor que nadie (…) sino siguiendo los pasos de Jesús».
En ese sentido, el cardenal Porras recordó que todos somos «misioneros» en la sociedad, es decir, en la capacidad de salir de uno mismo. Poder entablar relación con personas que piensan distinto. Los feligreses están llamados a salir con valor y convicción de la religión que se profesa para enviar el mensaje del amor y la esperanza a las comunidades.
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Aseveró que las cosas se aprenden mejor «cuando tenemos que sudarlas un poquito», poniendo el ejemplo a los estudiantes que deben aprender sus conocimientos por sí mismos y no esperar el camino fácil.
La constancia, la paciencia y saber que lo que se aprende sirve para ser útil en la sociedad.
A lo largo de su discurso, el Cardenal Porras destaca cómo nuestras acciones diarias pueden ser un reflejo de la fe que profesamos, invitándonos a ser agentes de cambio en el mundo. Nos anima a vivir nuestra espiritualidad de manera activa, sirviendo a los demás y compartiendo los valores cristianos en cada rincón de nuestra vida.
