(Caracas, 04 de agosto de 2025. Lismar Rebolledo/MundoUR).- Luis Angarita, internacionalista y decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Central de Venezuela, analizó la reciente reacción de los mercados globales frente a la entrada en vigencia de los nuevos aranceles impuestos por Estados Unidos. Según Angarita, “la reacción del viernes fue natural, tenemos un antecedente muy cercano que es liberation day, que fue el 01 de abril donde Donald Trump anuncia esta gran cruzada, lo que ya hoy conocemos como la guerra económica, la guerra arancelaria, donde hubo pánico”.
El experto explicó en entrevista concedida a Román Lozinski para Circuito Éxitos de Unión Radio que tras la fuerte caída de las bolsas en abril, Trump otorgó un periodo de tres meses para negociar, que ya cumplió. “Se vuelve a estar en esa nueva amenaza, en principio había dicho que era el 01 de agosto, para algunos lo alargó una semana más como fue el caso de México”. La incertidumbre derivada de esta situación genera reacciones tanto en los mercados como en la política internacional, pues “estamos llegando a una nueva era que es la era de una negociación política, diplomática y es mucho más allá que lo económico, que es el uso del arancel para otros fines que no sean estrictamente comerciales”.
Sobre la evolución posterior al viernes, Angarita indicó que “fue primero el pánico de escuchar otra vez que vienen los aranceles, luego recomponer otra vez esa ruta de crecimiento que el mundo la ve con mucho cuidado porque ven que esto va a frenar volúmenes comerciales, esto va a frenar cadenas globales de valor”. Además, subrayó que organismos internacionales ajustan constantemente sus previsiones, ante la reducción en el crecimiento económico mundial, reflejado en la volatilidad de las bolsas, que “cae pero vuelve a crecer más tímidamente”.
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En cuanto a América Latina, el analista destacó tres modelos de reacción. México mantiene una negociación comercial profunda con Estados Unidos, donde “la relación comercial es hasta el 90% de los productos”, y aún está en proceso de diálogo. Brasil enfrenta un enfrentamiento abierto, marcado por tensiones políticas entre Lula y Bolsonaro, en lo que Angarita define como “la guerra política”. El resto de los países latinoamericanos muestran fragilidad frente a la poderosa economía norteamericana, que “es un potente negociador,” así como recordó la frase de un mexicano: “es mejor tener el 40% de algo al 100% de nada”.
Sobre el papel de China, Angarita señaló que “se ha vuelto más protagonista en todos los mercados internacionales.”
Finalmente, el internacionalista alertó sobre las consecuencias económicas globales, enfatizando que “tras lo sucedido se puede esperar una inflación más que todo en el mercado doméstico”, pero sobre todo “el efecto de retroceso del comercio internacional”, que afectará el crecimiento mundial y la calidad de vida. “El comercio ha sido lo que ha servido de crecimiento, esto ha palancado el crecimiento mundial económico durante unos 40-50 años”, concluyó.
