(Caracas, 06 de agosto de 2025. Ashley Gómez/MundoUR).- Tamara Herrera, economista jefa de Síntesis Financiera calificó de «buena» la noticia de la licencia privada que autoriza a Chevron a reanudar sus operaciones en Venezuela
«Es una noticia buena porque además creo que debería venir no solo el efecto cascada o demostración, hacia el resto de las empresas que están interesadas o entrando a participar en la industria petrolera nacional sino que además, tiene el interés de crecer», dijo Herrera en entrevista con Shirley Radio para el Circuito Onda.
Sin embargo, la experta enfatizó que la parte negativa de la nueva licencia es que «no es un retorno a las mismas condiciones de antes», debido a que se prohibió el método de pago que implicaba que las divisas tenían que pasar por el mercado cambiario. Ahora, toda la intervención que hace el Banco Central de Venezuela, en gran medida por las sanciones, es en efectivo y eso «logísticamente es un problema», según Herrera.
La economista también añadió que la llegada de Chevron también representa un «alivio de un desafío logístico (…) porque durante los dos meses de ausencia se observó que la producción se mantuvo pero además, se sacrificó excedente exportable. Porque Petropiar tuvo que hacer un reacomodo y abastecer parte del mercado interno. Entonces, el retorno a la actividad normal significa que ese reto logístico no está y los procesos van a fluir».
Herrera calculó que el año pasado el aporte a las divisas que entraron a la economía privada fue de 2400 millones de dólares y este año esa cifra ha caído un 15%.
«De haber retornado en las mismas condiciones de antes uno podría estar pensando en algo como una exportación de 4600 por el lado de Chevron (…) ya la regalía correspondiente a eso no pueden entrar, 1600 millones que era lo que debía entrar, va a entrar en forma de crudo, que es lo que va a entregar. Pero el resto, de todo lo que cierta actividad de pagos internos va a entrar. Entonces, el cambio con respecto al año pasado de 2400 millones uno puede estimar que van a entrar 600», explicó.
Tras la noticia de la interrupción de las operaciones hubo una baja «instantánea» en la inyección de divisas según la experta, pero se mantiene optimista con lo que pueda pasar a mediano plazo. «Este año es un año malo por el entorno petrolero internacional (…) lo estamos sintiendo en una caída del ingreso de exportación, se dificulta satisfacer la demanda de divisas que existe en el país. Si siguen habiendo buenas noticias, yo creo que se puede mejorar ese desempeño pero es inevitable la devaluación que ha habido de la moneda, y si hay devaluación hay inflación, y obviamente este es un año donde se revierte el proceso de mejora muy gradual que veníamos transitando desde la salida de la hiperinflación».






