Experta aseguró que asesinato de senador es una «vuelta al pasado amargo» de Colombia

(Caracas, 13 de agosto de 2025. Lismar Rebolledo/MundoUR).- María Margarita Zuleta, directora de la Escuela de Gobierno de la Universidad de Los Andes en Colombia, afirmó que Colombia enfrenta un “sabor muy amargo de vuelta al pasado” tras asesinatos que impactan a la juventud y la vida pública, y advirtió sobre la acción de organizaciones criminales y fracturas políticas que complican la gobernabilidad y la paz.

La académica recordó el caso de Miguel, un dirigente descrito como símbolo de renovación política, que «Miguel tenía 39 años, había sido concejal de Bogotá muy, muy joven y era una figura muy juvenil que encarnaba la esperanza para las personas interesadas en lo público». Para Zuleta, la violencia contra líderes jóvenes representa «matar el futuro de forma violenta» y «asesinan una mirada distinta, respetiva», un golpe que reabre viejas heridas familiares y colectivas, «A todos se nos viene a la cabeza la muerte de su madre, se repite la historia y genera mucho dolor».

Tambien te puede interesar: Embajador de Colombia: Zona Binacional “debe contar con presencia del sector privado”

Sobre el panorama político, Zuleta relativizó la idea de una polarización absoluta entre sectores como los representados por Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos. «El intercambio entre Uribe y Santos no hablaría que allí hay polarización, porque allí hay unas diferencias de matices», explicó, y precisó que las discrepancias giran en torno al proceso de paz y al diseño de la justicia transicional. No obstante, advirtió que existen «fracturas personales que quizás no vayamos a llegar a unir a la oposición» y que ello puede tener consecuencias graves para quienes defendían posiciones como las de Miguel Uribe Turbay, vinculadas a la defensa institucional y la libertad de empresa.

Zuleta también señaló el papel desestabilizador de las economías ilícitas y las organizaciones criminales, que «nosotros estamos teniendo un problema de gran número de organizaciones criminales desestabilizando, generando unas economías ilegales que le hacen mucho daño a la paz». Añadió que esos grupos actúan sin distinguir objetivos, «a esos grupos no les importa quien está en el medio, ellos van en confrontación», lo cual ha derivado en homicidios de miembros de la fuerza pública, líderes sociales y líderes ambientales.

La directora de la Escuela de Gobierno subrayó la gravedad del fenómeno y su impacto en la defensa de liderazgos populares, manifestó que «es triste que en el gobierno de la defensa de los liderazgos populares hayan sido el momento que tenemos más lideres asesinados, eso genera muchas molestias». Zuleta concluyó que estos hechos obligan a repensar las estrategias de seguridad, justicia y reconciliación para retomar una narrativa de paz y protección de la vida pública.