(Caracas, 9 de noviembre de 2025 – MundoUR).- El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Caracas, monseñor Carlos Márquez, ofició este domingo la misa -en la que se celebra la 32° semana del tiempo ordinario- donde reflexiona sobre la esperanza del cristiano, que radica en vivir felices para siempre con Cristo en el Cielo.
Monseñor Márquez destacó que el ser humano no quiere vivir sufriendo en el dolor y la miseria, sino en felicidad perpetua. Por ello, destacó que el Cielo «es la realidad, el sitio, el estado de vida donde estaremos plenamente felices; sin mancha de dolor, tristeza y muerte».
Recordó que Cristo sufrió como nosotros lo hacemos. Murió así como nos pasará, pero Él resuscitó. No solo para él, sino para que todos nosotros podamos vencer a la muerte y vivir en el Cielo junto a su compañía. Sin embargo, destacó que esta esperanza no sirve «si no ilumina nuestra vida aquí y ahora».
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En ese sentido, explicó que se debe tener un sentido de trascendencia en la vida y hacerla presente lo que esperamos, no tiene sentido tener esperanza. Por ello, subrayó que el camino al Cielo es comenzar a vivir en la Tierra felices con Cristo, siguiendo el camino del amor fundamentado en la verdad, la justicia, la libertad, perdón, paz, alegría y fraternidad.
Además, monseñor Márquez destacó que debemos reflexionar si nos recordarán después de morir y la forma en cómo nos recordarán. Hay que pensar cuál es el camino del verdadero éxito y la plenitud, por lo que solo destacó que se llega viviendo en el amor que Cristo nos enseña.
