(Caracas, 1° de diciembre de 2024 – MundoUR).- La Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) confirió el pasado 29 de noviembre la Orden homónima al cardenal y excanciller de esa casa de estudios, Baltazar Porras; el artista plástico Jacobo Borges y la fundadora de la red de bibliotecas públicas, Virginia Betancourt.
El acto se llevó a cabo en el Aula Magna del campus en Montalbán en el marco de la Feria del Libro del Oeste, en su novena edición, con la intervención de la antropóloga Ocarina Castillo, quien calificó a los homenajeados como “tres pilares de nuestra historia sociocultural contemporánea” debido a sus aportes al país.
Por su parte, el rector de la UCAB, Antonio Peraza, agradeció a los homenajeados por aceptar el reconocimiento y espera que el país pueda avanzar a un mundo de igualdad y justicia a pesar de las adversidades.
En su discurso de aceptación, el cardenal Porras invitó a la reflexión sobre el sentido de la identidad para que el cambio hacia un país con mayor igualdad y justicia no se quede solo en deseos.
Las intervenciones de Virginia Betancourt y de Jacobo Borges estuvieron llenas de anécdotas personales, cargadas de calidez y agradecimiento a las personas que les permitieron y ayudaron a encontrar sus propios caminos y consolidar sus proyectos.
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Betancourt relató cómo, al regresar a Caracas tras el exilio de su padre –luego presidente de la república, Rómulo Betancourt– se unió a un grupo y aprendió «cómo ejercer la ciudadanía» con un programa pionero (1960) para la recolección de libros de primaria usados y poner en marcha un plan de canje y donación que tuvo «una respuesta arrolladora». Así nació el Banco del Libro.
Sus recuerdos la llevaron a repasar la mala calidad de los textos existentes a mediados del siglo XX y cómo encontró el apoyo y los recursos para contratar especialistas que abrieron las puertas a nuevos y mejores libros escolares, a constituir nuevas bibliotecas, hasta llegar al gran proyecto inaugurado en 1989 con el edificio de la Biblioteca Nacional.
Por su parte, Jacobo Borges contó sus experiencias autodidactas y donde se nutrió del mundo artístico de su juventud con personas que, para entonces, estaban en formación como Jesús Soto, Antonio Estévez, Aldemaro Romero o Rafael Cadenas. «Así fui armando mi propia universidad», confesó.
«Que yo supe lo que yo quería hacer. No tenía las herramientas, no tenía el conocimiento, ni tenía recursos, y toda información que me llegaba la tomaba, y una de las que me llegó fue dónde quedaba la Escuela de Artes Plásticas», dijo sobre cómo sobrellevó su condición socioeconómica y desarrollar su talento.
Con información de UCAB