(Caracas, 11 de marzo de 2025. MundoUR).- Una iniciativa en Venezuela siembra micro bibliotecas en diversos rincones del país, con el objetivo de fomentar el hábito de la lectura en comunidades vulnerables. El trabajo lleva por nombre «Proyecto Remo» y su coordinador, Óscar Hernández, compartió para Valeria y Jorge el surgimiento del proyecto.
«Según un estudio reciente, solo el 1% de los niños de 10 años en Venezuela sabe leer. Bajo el lema lleva un libro, deja un libro, Proyecto Remo fabrica, instala y dota de libros pequeñas bibliotecas de madera en diferentes comunidades» explicó Hernández.
La historia detrás del proyecto
«Nació sin mayores análisis, simplemente fue una corazonada de hacerle un tributo a un amigo periodista, Argenis Martínez, quien falleció. Recibí su colección de libros como donación y pensé que era el momento de dejarlos al acceso público«, explicó Óscar.
Desde esa primera micro biblioteca instalada en su casa, el proyecto creció significativamente. «Hoy ya tenemos casi 30 casitas sembradas en toda Venezuela, con muchos libros circulando», añadió.
¿Cómo puedes contribuir?
Óscar también destacó la importancia del centro de acopio ubicado en Villa San Remo, donde las personas pueden donar libros. «Los revisamos y arreglamos para colocarlos en nuestras micro bibliotecas. Invitamos a todos los que tengan libros en casa que ya no usen a que nos apoyen», dijo.
Además, enfatizó que la idea detrás de las micro bibliotecas es simple: «Si encuentras un libro, puedes llevártelo, y lo ideal es dejar otro a cambio. Así garantizamos que siempre haya títulos disponibles».
Un impacto social
Este tipo de iniciativas, según Óscar, son fundamentales para crear tejido social y contribuir a la educación.
«Las micro bibliotecas pueden influir en la gente y ayudar a formar comunidades. No se necesitan grandes recursos, solo las ganas de hacer algo positivo«, comentó.
Con una creciente demanda y más solicitudes que capacidad de respuesta, Proyecto Remo sigue adelante, buscando apoyo de empresas y ciudadanos para expandir su alcance.
«La idea es que podamos tener casitas de estas en todas partes de nuestro país, donde más se necesita fomentar la lectura», concluyó Óscar.