(Caracas, 30 de junio de 2025. Ashley Gómez/MundoUR).- Tras la aprobación de la eliminación las pruebas internas o diagnósticas para la admisión a las universidades públicas del país, la Asociación de Profesores de la Universidad Central de Venezuela y el rector de la misma casa de estudios muestran preocupación por la medida tomada.
«La preocupación se centra fundamentalmente en temas que están asociados al ingreso (…) actualmente la mayoría del ingreso a las universidades las tiene el CNU, es decir, a través de la prueba de la OPSU (…) y es una cuota muy reducida la que tienen las universidades, que no supera el 30%», explicó José Gregorio Alonso, presidente de la Asociación de Profesores de la Universidad Central de Venezuela.
En el mismo sentido, Alonso acotó que los resultados del método de la OPSU no son exitosos. «Hablan de 175 universidades, háganle el examen a buena parte de esas universidades de la permanencia de sus estudiantes, cuántos superan el segundo semestre, el tercer semestre, cuántos de los que ingresan terminan la carrera (…) por ejemplo, en la facultad de ciencias nuestra el año pasado, el 64% de los estudiantes que ingresaron en el primer semestre no aprobaron todas las asignaturas».
En entrevista para el programa Shirley Radio del Circuito Onda, el presidente de la Asociación hizo énfasis en que debe existir una articulación entre la educación media y la universitaria y criticó la decisión tomada por el Consejo Nacional de Universidades.
«Hay problemas incluso más urgentes, nosotros tenemos un problema de descapitalización de nuestros recursos humanos tremendo. Más del 44% de los profesores se han ido y la mitad de nuestros estudiantes. En pregrado en la UCV, terminando el siglo pasado teníamos 58.000, hoy no superamos los 25.000».
Asimismo, el rector de la Universidad Central de Venezuela, Victor Rago comentó que las pruebas de admisión no son excluyentes, sino que son mecanismos complementarios. «Es una medida infortunada que se toma sin haber promovido un intercambio con las universidades, sobre todo con aquellas como la nuestra, que han desarrollado a lo largo del tiempo valiosos instrumentos de asignación de estudiantes, de admisión y de asignación y a la carrera».
Rago afirmó que fue una decisión que no se discutió lo suficiente y que impacta la autonomía de las universidades. «¿Afecta a la autonomía? Sí, claramente esto tiene que ver con la autonomía universitaria, porque aunque el artículo 20 de la Ley de Universidades establece que para la admisión en los estudios de educación universitaria deben seguirse las pautas establecidas por el órgano rector, que es el Ministerio de Educación Universitaria a través del Consejo Nacional de Universidades, en el caso de las universidades autónomas esas pautas funcionan digamos como una orientación general, como una recomendación (…) y el artículo 26 establece a las universidades la función de determinar el número de estudiantes que ingresan a los estudios y la forma de hacerlo».
