(Pekín, 17 marzo, 2021).- China protestó hoy por las últimas sanciones estadounidenses a 24 funcionarios chinos a cuenta de la reforma electoral en Hong Kong, las cuales se anunciaron a menos de 48 horas de la primera reunión de la era de Joe Biden con Pekín.
«China condena enérgicamente esas sanciones y va a tomar represalias», aseveró hoy el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Zhao Lijian en rueda de prensa.
En la reunión, que tendrá lugar el jueves en Alaska, EEUU tanteará a China y será «muy claro» al mostrar su posición en temas como Hong Kong, Xinjiang, Taiwán o la estrategia de «coerción económica» de China, adelantó Washington a la prensa.
No obstante, el encuentro llegará con un nuevo escollo bajo el brazo después que el secretario de Estado, Antony Blinken, sancionase a 24 funcionarios chinos, algunos de ellos con castigos previos, a los que se responsabiliza de rebajar la autonomía de Hong Kong.
Según el último informe de Blinken, la Asamblea Nacional Popular (ANP, Legislativo) de China «socavó» el sistema electoral de la excolonia británica con la reforma que aprobó la semana pasada.
«China dejará muy clara su postura en Alaska», amagó hoy el portavoz Zhao al hablar de las sanciones o del hecho de que Blinken advirtiera, durante su última visita a Tokio, con responder a las «coerciones y agresiones» de Pekín en la región de Asia-Pacífico.
En la reunión de Alaska participarán Blinken y su homólogo Wang Yi así como el asesor de seguridad nacional de Biden, Jake Sullivan, y el responsable del Partido Comunista de China (PCCh) para Asuntos Exteriores, Yang Jiechi.
DISUADIR A WASHINGTON, OBJETIVO DE PEKÍN
Las relaciones entre China y Estados Unidos se deterioraron de forma dramática durante la era de Donald Trump con colisiones en planos como el comercial, el diplomático o el tecnológico, y aunque Biden ha prometido otro enfoque, su Gobierno no parece tener prisa por poner fin del todo a sus conflictos con Pekín.
Expertos citados hoy por la prensa local creen que los líderes chinos intentarán disuadir a los estadounidenses para que rebajen el tono: «Tienen que ser más listos que Trump y entender que la confrontación no le trae nada bueno a EEUU», indica al diario Global Times el experto Lü Xiang de la Academia China de Ciencias Sociales.
A principios de marzo, el titular chino de Exteriores, Wang Yi, trazó sus líneas rojas para reparar las maltrechas relaciones, que pasarían por suprimir los aranceles a los productos chinos o impedir lo que considera «intromisiones en los asuntos internos de China», en referencia a las críticas por el declive de las libertades en Hong Kong o los abusos a las minorías musulmanas en Xinjiang.
Por otra parte, que Biden renueve sus alianzas en Asia y en Europa preocupa a los mandatarios chinos, puesto que daría oxígeno a un Washington al que percibieron en declive durante la era Trump.
En ese sentido, analistas del diario South China Morning Post apuntan hoy que China podría tomar represalias contra la Unión Europea (UE) si decide imponer sanciones a Pekín a cuenta de Xinjiang, si bien «serían más bien moderadas» porque «en la relación entre China y la UE hay mucho más espacio para la cooperación», señala el profesor Shi Yinhong de la Universidad Renmin. EFE