Tegucigalpa, 21 feb (EFE).- El Gobierno de Honduras aprobó por 45 días más la implementación de un estado de excepción, vigente desde el 6 de diciembre de 2022 para enfrentar la violencia criminal y la extorsión, y lo extendió a 123 de los 298 municipios del país, informó este martes una fuente oficial.
Esta segunda prórroga fue aprobada la noche del lunes en Consejo de Ministros y se extendió de 75 a 123 municipios del país centroamericano, indicó la Policía Nacional de Honduras.
«La inclusión de 48 municipios más obedece a que análisis estadísticos y de inteligencia policial los catalogan como territorios del país que pueden verse afectados por el fenómeno delictivo y la influencia de estructuras como maras y pandillas, así como, otras agrupaciones criminales», señaló la institución.
Con la nueva ampliación quedarán suspendidas hasta el próximo 6 de abril las garantías constituciones en 235 de los 298 municipios de Honduras, según las autoridades.
El estado de excepción ha permitido a las fuerzas de seguridad, según la Policía hondureña, «golpear a estructuras criminales que se han lucrado de la población hondureña mediante la extorsión», delito que en los últimos años ha aumentado y causado centenares de muertos y la ruina de miles de micros, pequeños y medianos empresarios.
La extorsión es una de las actividades criminales que «más recursos económicos ilícitos» ha dejado a las maras y pandillas, añadió.
El estado de excepción ha contribuido también a identificar y capturar a integrantes de estructuras criminales que se lucran además de otros delitos conexos como el tráfico de armas y drogas, robo de vehículos, homicidios, femicidios y lavado de activos.
Bajo este régimen de excepción, las autoridades dan cuenta de las capturas de más de 4.233 personas por varios delitos y 415 supuestos pandilleros.
Decomisaron 836 armas de fuego, erradicaron más de 42.000 arbustos de hoja de coca e incautaron 80 kilos de cocaína y cerca de 3.000 libras (1.360 kilos) de marihuana, según cifras oficiales.
Honduras también registra una reducción de 132 muertes violentas desde la aprobación del estado de excepción y, además, logró bloquear 523 billeteras electrónicas y decomisar 237 tarjetas SIM utilizadas por delincuentes.
«El combate a la extorsión y delitos conexos demanda un esfuerzo adicional y un enfoque efectivo para un alcance integral que permita mejorar las condiciones de seguridad en los municipios intervenidos», enfatizó la Policía hondureña.
Con la aprobación del estado de excepción, las autoridades hondureñas han observado «una mutación» en el actuar de las estructuras criminales, ya que ahora se mueven de áreas urbanas a las rurales, principalmente a aquellos municipios no intervenidos. EFE