Sacerdote expulsado de la Iglesia venezolana asegura que es inocente de lo que se le acusa

(Caracas, 29 de julio de 2023 – MundoUR).- El ciudadano Enrique «Kike» Alaña Morillo, quien fuera expulsado de la Arquidiócesis de Caracas en días pasados por un supuesto delito de abuso sexual, manifestó en un video difundido en redes sociales que es inocente de lo que se le acusa y que le costó su carrera como sacerdote.

Alaña Morillo manifestó en el audiovisual que fue expuesto de forma «injusta» y «poco caritativa» por parte de los medios. Relató que en 2021 fue llamado por el cardenal Baltazar Porras, quien le notificó que era objeto de una investigación por un presunto abuso sexual.

«Cuando escucho la noticia, salgo de la casa del señor cardenal con la cabeza gacha por el dolor de esta acusación asquerosa pero, al mismo tiempo, con la frente muy en alto porque como lo he manifestado desde el principio, soy inocente», dice el sacerdote expulsado.

Aseveró que desde entonces estuvo trabajando en su inocencia y que año y medio después, la Fiscalía determinó que no había elemento de convicción alguno para acusarle, lo que a su juicio le hace inocente de ese delito.

Comentó que al mismo tiempo se llevaba adelante una investigación dentro de la Iglesia; mientras preparaba su defensa. «Después de un tiempo, en el que busqué la manera en saber qué sucedía para demostrar mi inocencia, el 24 de febrero de 2023 me llaman de la residencia del señor cardenal para notificarme desde Roma que hubo un mandato en el que tenía que remitirme al estado laical».

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Agradeció además a la familia del niño con el que fue involucrado por el presunto abuso sexual, ya que afirmó que desde el primer momento recibió su respaldo.

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En la mañana del 26 de julio se conoció una notificación por parte de la Arquidiócesis de Caracas, firmada por el cardenal Baltazar Porras, en la que se comunica la expulsión oficial del sacerdote Enrique Alaña; aunque nunca indica el por qué de la medida.

Lo que sí indica la misiva es que después de una investigación realizada y por el mandato de la Santa Sede, se tomó la medida de dimisión de Enrique Alaña Morillo, por lo que ya no lo considera más como sacerdote.

Alaña Morillo fue párroco en la iglesia de Cumbres de Curumo hasta 2021. Además, fundó la plataforma Arca Iberoamérica, que en su sitio web asegura que reúne «a los artistas católicos de Iberoamérica en todas sus expresiones», y que tiene presencia en «Estados Unidos, México, Centroamérica, Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú, Argentina y Chile».