(Berlín, 28 diciembre, 2020).- Varias regiones de Baviera (sur de Alemania) empezaron este lunes, un día después de lo previsto, la vacunación contra la covid-19, tras revelarse ayer fallos técnicos ya que no llegaron a la temperatura de ultracongelación requeridas.
Las autoridades sanitarias de varios distritos de Alta Franconia dieron por subsanado estos problemas este lunes, después de cerciorarse de que las dosis no habían sufrido alteraciones.
La misma situación se dio en algunos departamentos del vecino «Land» de Baden Württemberg, aunque ahí se subsanó el problema en unas pocas horas y se empezó la vacunación el mismo domingo.
El ministro alemán de Sanidad, Jens Spahn, expresó hoy su confianza en que se podrá aumentar la producción en Alemania de vacunas de la farmacéutica BioNTech y su socio estadounidense Pfizer.
«Nuestro objetivo es que a partir de febrero y marzo se puedan producir más vacunas en Alemania, lo que aumentaría enormemente nuestra capacidad», declaró Spahn a la televisión pública ZDF.
BioNTech ha adquirido una planta de producción en Marburg (oeste) de la suiza Novartis, con la perspectiva de aumentar su capacidad, recordó el ministro. La producción de la vacuna implica un proceso «técnico muy ambicioso y cuidado», cuyo ritmo no se puede «acelerar» ni tampoco trasladar a otras empresas, sin más.
Como la mayoría de los países de la Unión Europea (UE), Alemania inició su campaña de vacunación ayer domingo. Los primeros vacunados fueron residentes en geriátricos, tras lo cual se procedió a aplicar las primeras dosis a los trabajadores sanitarios más expuestos a infecciones.
El plan de Alemania, con 83 millones de habitantes, es distribuir hasta fin de año 1,3 millones de dosis entre los «Länder», a cuyas autoridades sanitarias corresponde organizar la vacunación.
Se espera que a partir de enero se inyecten unas 700.000 dosis semanales en el total de 440 centros de vacunación de todo el país. Como en la mayoría de la UE, se empieza por los mayores de 80 años, personal sanitario y otros grupos especialmente vulnerables.
Hacia febrero se espera seguir con ciudadanos mayores de 70 años e ir descendiendo por franjas de edad y nivel de vulnerabilidad.
El objetivo del gobierno es poder ofrecer a todos los ciudadanos no incluidos en esos grupos la opción de vacunarse a partir de mediados del próximo año, explicó Spahn.
EFE
