(Caracas, 4 de junio de 2021). Raymond Orta, forense informático, detalló cuáles son los procedimientos digitales ejecutados por los delincuentes informáticos para estafar a las personas mediante la aplicación de Whatsapp y redes sociales.

La calificación con la que Orta expone los casos ya dice mucho. “Nuevas cepas de las estafas por redes sociales”, dijo Orta con referencia a la masificación de estos procesos delincuenciales a través de diversas plataformas de comunicación 2.0 como consecuencia de la pandemia en Venezuela.

Ahora están escribiendo Pedro, Juan, José para tratar e atrapar incautos” explicó Orta. A su vez comentó que ahora hay más facilidades para los estafadores consecuencia de las interconexiones entre plataformas que están realizando. “Ahora existe conexión entre lo que es Instagram, Whatsapp e igual con Facebook”, dijo el especialista en informática.

“Existen nuevos peligros porque combinados con lo que es el hackeo de Whatsapp que se hace a través del envío del código de verificación. En estas últimas semanas hemos visto que una vez que hackean la cuenta, el delincuente informático se mete en los grupos de Whatsapp y aprovechándose la identidad de otro es mucho más fácil hacerlos caer con ‘Hola soy María agrégame a tus contactos’”, explicó el forense Orta.

En las recomendaciones para evitar caer en este tipo de delitos informáticos, Orta comentó que es importante solicitarle información a la persona que creemos nos está engañado. Hechos específicos o experiencias de vida que hemos compartido con amigos o compañeros.

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Al perder el contacto con Whatsapp, la aplicación no hace ninguna notificación. Cuando trate de recuperarse la cuenta es posible darnos cuenta que nuestra cuenta de Whatsapp no esté funcionando”, detalló Orta.

En el “ámbito nacional es un delito que se comete a distancia”, incluso ha habido casos de delitos ejecutados por “personas que no están en Venezuela” pero que precisan de colaboradores en el país para cometer las fechorías.

Detéctalos

 Con frecuencia “las personas hacen una oferta irresistible. Es la primera señal de que estamos en presencia de un posible fraude”. Las sumas suelen variar entre los 40$ o más de los 5000$ según los registros que ha estudiado el forense Orta.

Ya no existe una medida o target en específico, ahora es caiga quien caiga” finalizó el especialista informático.  “Yo invito a todas las personas a denunciar” dijo, porque a veces un cúmulo de informaciones son las que terminan dando con los allanamientos o las capturas de estas bandas.