(Bruselas, 15 junio, 2021).- La pandemia del coronavirus ha ralentizado el progreso de la Unión Europea (UE) para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas, en particular en el caso de la economía y el mercado laboral, la educación y la igualdad de género.
Son las conclusiones de un informe elaborado por la oficina de estadística comunitaria, Eurostat, y publicado este martes que mide el avance de la UE en su conjunto en los diecisiete ODS durante los últimos cinco años.
Adoptados en 2015 por los Estados miembros de Naciones Unidas, los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 son una serie de metas por áreas para poner fin a la pobreza, proteger el planeta o garantizar que todas las personas gocen de paz y prosperidad para el final de la década.
El estudio destaca que en el ámbito de la economía y el mercado laboral (objetivo 8), la crisis del coronavirus ha interrumpido «la continua mejora» observada desde 2013.
Añade que se ha detectado un impacto «similar» de la pandemia en el área de la educación (objetivo 4), la igualdad de género (objetivo 5), la reducción de otras desigualdades en y entre países (objetivo 10) y las asociaciones globales para conseguir los ODS (objetivo 17).
«La pandemia ha hecho que conseguir la Agenda 2030 y los ODS sea incluso más desafiante, tanto para la UE como globalmente», señala el informe.
Agrega que un progreso «moderado» se aprecia en las ciudades sostenibles (objetivo 11), la producción y el consumo responsables (objetivo 12), la agricultura sostenible (objetivo 2), así como en la investigación y el desarrollo y en la innovación (objetivo 9), pero matiza que en esos casos los datos de 2020 no están disponibles, por lo que el análisis refleja la situación previa a la pandemia.
También se limitaron los datos hasta 2019 y, por tanto, no quedan registradas las consecuencias de la COVID-19, en el «buen progreso» visible en la reducción de la pobreza y la exclusión social (objetivo 1) y en la mejora de la salud en la UE (objetivo 3).
Por otro lado, en la lucha contra el cambio climático (objetivo 13) apenas se detectaron cambios y la situación permaneció «más o menos» estable.
«Aunque la UE ha estado intensificando sus esfuerzos para apoyar la acción por el clima y la mitigación, la evaluación queda afectada de forma negativa por los impactos del clima intensificados que Europa está afrontando», indica Eurostat.
En cuanto a las energías asequibles y limpias (objetivo 7) y la gestión sostenible de los bosques, la lucha contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad (objetivo 15), se constata un «ligero alejamiento» de las metas en los últimos cinco años.
En el caso del séptimo objetivo, el resultado negativo se debe al incremento del consumo energético en los Veintisiete entre 2014 y 2019, de modo que no se recoge la reducción temporal que provocó el confinamiento en 2020.
El informe destaca que en el periodo de cinco años más reciente, el club comunitario consiguió «un gran progreso» en la promoción de la paz y la seguridad personal, el acceso a la Justicia y la confianza en las instituciones (objetivo 16).
Por lo que se refiere al agua limpia y el saneamiento (objetivo 6) y la vida submarina (objetivo 14), la tendencia de la Unión no pudo calcularse por la falta de datos de los últimos cinco años.
España está progresando y presenta una situación mejor que en el conjunto de la UE en el caso de la salud (3), poner fin al hambre (2), educación (4) o energía (7), mientras que avanza, pero su estatus es peor que el de la Unión en la reducción de las desigualdades (10), la desigualdad de género (5) o el trabajo decente y el crecimiento económico (8). EFE
