(Caracas, 21 de junio de 2021).- Carlos Fernando Calatrava, director de la escuela de Educación de la Universidad Católica Andrés Bello, aseguró que la deserción de las niñas migrantes se debe a la poca o ninguna planificación que pudieron haber tenido los padres al momento de emigrar.
En su mayoría los padres salen del país junto a sus hijos, sin la partida de nacimiento o algún documento legal que acredite la condición de identidad.
De igual manera está sucediendo con los varones aunque 1 de cada 3 niñas abandona los estudios, el 20%; porque “no hay cupo”, 20%; porque “tiene un hijo/a”, 15%, como consecuencia de la pandemia, alerta Plan International, organización humanitaria que trabaja por los derechos de la infancia y la igualdad de las niñas.
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Una de las consecuencias de falta de educación es entrar en mecanismo informales del trabajo. Además de incorporarse en espacios de formación que no le corresponde.
Asimismo engrosar los números de pobreza en el país de acogida.
