(Caracas, 1 de febrero de 2022).- Gerardo García, presidente del Proyecto Órbita CI 130, conversó sobre este programa diseñado para niños venezolanos con altas capacidades, rendimiento y/o superdotación.
Al hablar del proceso de identificación y diagnóstico, dijo que actualmente no van “advertirlos o buscarlos”. Todo lo contrario, resaltó que las personas son quiénes descubren este programa cuando se dan cuenta que los niños o jóvenes tienen un comportamiento peculiar como aprendizaje de lectura temprana o que destacan en algo.
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Adicionalmente, resaltó que el Proyecto Órbita CI 130 ha llegado a 400 niños y jóvenes en todo el país.
Por otra parte, dijo que para el mes de julio comenzarán a buscar los niños y jóvenes mediante el sistema nacional de talentos. Dicho sistema lo activaran trabajando en conjunto con los colegios.
Finalmente, indicó que “el talento está en todas partes”. En este sentido, explicó que “el asunto es qué hace uno como una ONG para identificarlo y brindar condiciones para que se desarrollo”.
¿Cómo surgió el Proyecto CI 130?
Al hablar de cómo surgió el Proyecto Órbita CI 130, recordó que todo se relaciona con la búsqueda de El Brujo de Bailadores. Aseguró que en aquel momento buscaban a un brujo, pero que al final conocieron a Miguel Alejandro Ramírez, un niño que destacaba por sus habilidades con la química.
A partir de ese momento, mencionó que la fundación dio un giro de 180 grados, y comenzaron a buscar una respuesta académica para que Miguel llegara hasta donde está actualmente.
Sobre Miguel Alejandro Ramírez, quien ya tiene 21 años, comentó que es “una de las promesas latinoamericanas más importantes en la química”.
Recordó que él no era un genio, sino que tenía un talento. Precisamente por esto aseguró que para ellos ahora “el negocio es cultivar talento”.
