(Caracas, 06 julio, 2022. Redacción: Daniela Brito).- Ángel Toledo Díaz, mexicano y familiar de una víctima del tiroteo en Chicago, perpetrado por un joven de 22 años, que dejó la cantidad de 7 victimas mortales.
El padre de Toledo fue el único latino que falleció en medio del tiroteo del 4 de julio, «no estaba solo, estaba con varios integrantes de la familia» dijo el mexicano y resaltó que su padre «estaba sentado en medio de todos sus familiares».
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«Ellos estaban en una esquina de una de las calles por las que iba a pasar el desfile» dijo y destacó que «estaban contentos, riendo con sus sobrinos e hijos».
Además, el mexicano resaltó que «cuando escucharon el primer disparo fue en la espalda de papá, uno en su cabeza y otro en su pie» y aseguró que «hay paz en nuestras vidas gracias a Dios».
«La vida no es nuestra, es prestada pero hay que darle gracias a Dios que tuvimos a mi padre en nuestras vidas» dijo Ángel Toledo.
El hombre recordó que cuando recibió la noticia «ya no había nada que hacer» y lo único que pudo hacer en el momento de recibir la noticia fue «doblar sus rodillas y pedirle a Dios por todas las víctimas y sus familiares».
El mexicano comentó que «no viven con miedo» a pesar de saber que es común escuchar noticias de algún tiroteo en la ciudad en los últimos tiempos, «las cosas pasan en cualquier momento, por eso no vivimos con miedo».
«Mi padre era jardinero, trabajaba arreglando jardines» dijo el mexicano y destacó que «hace 2 años no asistían a un desfile».
El hijo de una de las víctimas mortales acotó que «pensamos que estamos en un lugar seguro y cuando nos descuidamos el enemigo entra» y comentó también que «es algo que se pudo haber evitado».
