(Caracas, 3 de febrero de 2025).- Josué Bracamonte, director técnico de conexiones Cibercom, aseguró que el mundo de las cámaras de seguridad es muy amplio, insistiendo en que hoy en día, los usuarios buscan dispositivos sencillos de instalar, siendo los inhalámbricos la tendencia.
“Hay clientes que nos piden cámaras espías que se confunden con un botón” añadió iniciando la discusión sobre la privacidad.
Agregó que, como parte de sus servicios, varias cámaras de seguridad de los usuarios pueden estar conectadas a los servicios policiales en caso de una emergencia
También sugirió que, al momento de instalar dispositivos de vigilancia en espacios públicos, es prudente anunciar la existencia de estas a través de carteles.
Por su parte, Víctor Ordaz, abogado y profesor de delincuencia organizada, recordó que, según la constitución, dentro de los derechos individuales de las personas, está el derecho a la libertad y a la libertad de la privacidad.
Destacó que también existe el reglamento de servicios de vigilancia y seguridad privada, indicando que, dentro del derecho a la propiedad, se pueden instalar cámaras de seguridad.
Ordaz señaló que cuando la cámara le pertenece a un órgano de seguridad del estado, este tiene como obligación de vigilar, mientras que, si la cámara le pertenece a un privado y apunta a terrenos que colindan con otra propiedad se viola la privacidad.