(Vitoria, 22 de febrero de 2025 – EFE / MundoUR).- El Espanyol logró este sábado su primera victoria de la temporada fuera de casa al derrotar 0-1 al Alavés con un tanto en el minuto 86 de Fernando Calero que hunde al equipo vitoriano en la clasificación de LaLiga EA Sports.
El gol de Calero, además de suponer el primer triunfo de los ‘periquitos’ lejos de su feudo, sirve al Espanyol para abrir un hueco con los puestos de descenso en los que se mantiene el Alavés, que no tuvo las ideas claras en este duelo, y sigue sin ganar en casa desde el 1 de noviembre.
El conjunto catalán intentó llevar la voz cantante desde los primeros compases de un partido en el que pasaron pocas cosas en los primeros 15 minutos.
Una recuperación de Carles Aleñá y un centro raso que se envenenó fue el primer aviso serio de un Alavés que eligió los momentos de presión y fue ganando terreno poco a poco.
Los de Manolo González se apoyaron mucho en la banda izquierda de Javi Puado para generar peligro con dos balones al área que no conectó Roberto por muy poco.
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La defensa local estuvo atento y bien colocada en esos balones que buscaron al goleador del Espanyol, que logró acumular más minutos con el balón en campo rival.
El balón parado fue otra de las armas de los hombres de Eduardo Coudet, que tiraban más de energía que de fútbol para romper la defensa catalana, que ató en corto a Carlos Vicente.
Kike Gacía y Toni Martínez comenzaron a poner en peligro la meta visitante y el delantero murciano estuvo cerca de romper la igualada con un remate en el área tras un rechace, que se marchó junto al poste izquierdo de Joan García.
El campo y el juego caía por completo al banda derecha local y a la izquierda visitante y por ahí se desarrollaba todo el juego, a pesar de que los dos entrenadores se empeñaron en acumular hombres en el centro del campo.
En los primeros minutos de la segunda mitad, la grada demandó penalti por un caída de Carles Aleñá, pero el colegiado no lo consideró así. La reanudación dio continuidad al guion de la primera mitad, en la que el Alavés acabó con más intenciones que su rival.
Un fuera de juego previo evitó una pena máxima por mano en el área del equipo periquito, decidido a aguantar y buscar al Alavés en velocidad.
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Joan García salvó el primer gol local con una buena intervención en el minuto 63, tras un disparo de Carles Aleñá que se aprovechó de un rechace tras la indecisión de la zaga espanyolista para deshacerse del balón.
Los locales iban a por el partido, mientras que el Espanyol daba por bueno un empate que estuvo cerca de romperse con un gol en propia puerta de los periquitos, que perdieron a Pere Milla por lesión a los pocos minutos de ingresar en el campo.
Joan García volvió a aparecer para evitar el gol de Santi Mouriño, que esperaba para empujarla en el segundo palo, en el mejor momento de los albiazules en el partido.
Los vitorianos no pudieron cambiar el resultado en su mejor fase y el Espanyol recuperó el balón en la recta final del choque, donde los locales llegaron más justos de energía.
Y cuando todo parecía que iba a finalizar en tablas, Fernando Calero desequilibró la balanza en el minuto 86 tras una jugada a balón parado del Espanyol, sin aparente peligro.
El Alavés lo intentó en el descuento, pero el Espanyol se mantuvo firme para llevarse su primera victoria como visitante.
