(Caracas, 11 de mayo de 2023 EFE / MundoUR).- La Cancillería de Venezuela recibió el miércoles 10 de mayo a una delegación de Chile para abordar «distintos temas de interés binacional», un día después de que el Gobierno de Gabriel Boric informara del viaje de esta comisión oficial para «negociar» con Caracas nuevos vuelos que repatríen a cientos de migrantes varados en la frontera norte de este país suramericano.
«Recibimos, en la Cancillería, al secretario general de Política Exterior de la República de Chile, Alex Wetzig, quien, junto a una delegación, están en visita de trabajo en nuestro país para abordar distintos temas de interés binacional», informó el viceministro venezolano para América Latina, Rander Peña, en Twitter.
El funcionario, que compartió en la red social varias imágenes del encuentro, no detalló cuáles fueron esos asuntos de interés bilateral abordados con los representantes del Gobierno chileno.
El canciller de Chile, Alberto van Klaveren, dijo el martes 9 de mayo que el Gobierno de su país quiere «saber la disposición de Venezuela para generar nuevos vuelos».
«La información que nos ha entregado su Embajada en Chile es que hay varios ciudadanos que quieren regresar», aseguró el ministro durante una comparecencia en una comisión parlamentaria.
Además de Wetzig, la delegación de visita en Venezuela está integrada por el director general consular, Rodrigo Donoso, según señaló entonces Van Klaveren.
Un avión trasladó el domingo 7 de mayo hasta Venezuela a un total de 115 migrantes varados desde hace semanas en la frontera norte de Chile, que no podían retornar a este país ni ingresar a Perú por carecer de documentación.
El vuelo, que partió rumbo a Caracas desde la ciudad fronteriza de Arica, 2.000 kilómetros al norte de Santiago, fue costeado por el Gobierno de Nicolás Maduro y forma parte del programa «Vuelta a la Patria», gracias al cual ya han retornado cerca de 30.000 venezolanos desde 25 países distintos, según cifras oficiales.
Van Klarven había anunciado la realización de ese vuelo el día 4 para recoger a un grupo «bastante importante de migrantes venezolanos» que se encuentran varados en la frontera entre Chile y Perú en condiciones críticas.
«Es un avance importante y permite enfrentar adecuadamente este problema humanitario […] Siempre hemos dicho que este tema requiere de un enfoque y un abordaje regional, porque es un problema que afecta a nada menos que a cinco países y la respuesta tiene que ser colectiva», señaló el ministro de Relaciones Exteriores.
Esta situación se generó luego de que la presidenta de Perú, Dina Boluarte, decidiera militar las fronteras de la nación andina tras responsabilizar a venezolanos y haitianos de aumentar la criminalidad en ese país.