París, 16 dic (EFE).- El Gobierno francés anunció este jueves un endurecimiento de las condiciones de entrada a los viajeros procedentes del Reino Unido con el objetivo de intentar frenar la expansión de la variante ómicron del coronavirus.
En primer lugar, se exigirá a las personas vacunadas un test negativo (PCR o antígenos) de menos de 24 horas, en lugar de las 48 actuales, igual ya se exigía para los no vacunados, señaló un comunicado del Ejecutivo.
También será necesario un motivo «imperioso» para justificar la entrada en Francia, lo que supone limitar el acceso a los residentes en Francia y a sus familiares.
«No se permitirá desplazarse por motivos turísticos o profesionales», afirma la nota.
Además, los viajeros deberán registrarse antes de su viaje en una plataforma digital en la que deberán detallar su dirección en Francia, donde tendrán que aislarse durante siete días, bajo control policial.