(Caracas, 11 de noviembre de 2024. Jesús Jiménez/MundoUR).- En un contexto alarmante para América Latina, donde se generan más de 130 millones de toneladas de residuos orgánicos al año, que incluyen alimentos perfectamente aptos para el consumo, el Banco Alimentar de Venezuela surge como una respuesta innovadora y solidaria.
Según el informe del Estado Mundial de la Seguridad Alimentaria y Nutricional 2024, 41 millones de personas sufren hambre en la región, mientras que 187,6 millones padecen inseguridad alimentaria. Ante esta contradicción, surge la urgente pregunta: ¿cómo resolver la ecuación de la abundancia desperdiciada y la escasez en los hogares de millones de personas?
Marianela Fernández Camacho, presidenta del Banco Alimentar de Venezuela, explica que la solución pasa por una logística adecuada para rescatar y redistribuir los alimentos. «Venezuela era uno de los pocos países sin un banco de alimentos, pero ahora contamos con esta institución, que comenzó en Caracas con el apoyo de la Federación Portuguesa de Bancos Alimentarios. Su misión es muy clara: rescatar alimentos frescos, que son los más costosos y nutritivos, y entregarlos a quienes más lo necesitan», asegura Fernandes.
La producción y el desperdicio de alimentos son responsables de una gran parte de las emisiones de gas metano. Además, la falta de infraestructura logística es una de las principales razones por las que miles de toneladas de alimentos terminan en la basura cada año. Para cambiar esta realidad, el Banco Alimentar trabaja de la mano con agricultores, productores y supermercados, para recuperar alimentos que, por razones estéticas o logísticas, no llegan al mercado.
Además, el Banco Alimentar tiene un sistema inclusivo que permite que tanto instituciones de atención social, como orfanatos, ancianatos y hospitales, puedan beneficiarse de la comida rescatada. «Lo más importante es que logramos incluir a toda la cadena alimentaria, desde la agricultura hasta el retail, para evitar que los alimentos lleguen a la basura y, en su lugar, lleguen al estómago de quienes más lo necesitan», afirmó la presidenta.
Para colaborar, los interesados pueden registrarse como voluntarios en el sitio web del Banco Alimentar de Venezuela (www.bancoalimentarve.org) o en sus redes sociales. La organización está lanzando su campaña anual de recolección de alimentos no perecederos, que se llevará a cabo el 30 de noviembre y 1 de diciembre en diversos supermercados.
La labor del Banco Alimentar de Venezuela no solo combate la inseguridad alimentaria, sino que también ofrece una solución ambiental al evitar el desperdicio masivo de alimentos. Una verdadera apuesta por un futuro más justo y sostenible para todos.