(Caracas, 23 de noviembre, 2023).- El sociólogo y asesor de Consultores 21 Trino Márquez, recordó que Venezuela se construyó sobre una base de clase media muy fuerte, que fue comparada en su momento con muchas sociedades europeas.
Explicó que hoy en día, más que clase media en el país, hay «gente no pobre». También destacó que para ser clase media, las personas deben poder tener un apartamento en la playa o la capacidad de ahorro, es decir, disfrutar de ciertos beneficios.
Márquez resaltó que, según el Banco Mundial, hay 28 millones de venezolanos, de estos, 17% están en pobreza extrema, representando 4.8 millones de personas.
Advirtió que 21 millones de venezolanos pueden cubrir el costo de la canasta básica «a duras penas».
El asesor de Consultores 21 indicó que hay dos métodos universales para medir los estratos, el primero es de las líneas de pobreza, que consiste en contrastar el costo de la canasta básica, que incluye la alimentaria y de servicios, con el ingreso familiar.
«Cuando el ingreso familiar no logra cubrir la Canasta básica se puede decir que es pobre» añadió.
Informó que el otro método es el de las necesidades básicas insatisfechas que considera educación, salud, servicios públicos y recreación, insistiendo en que, cuando una familia tiene un déficit en dos de esas dimensiones, se puede decir que esta está en una situación de pobreza.
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Por su parte, Ronald Balza, economista y decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la UCAB, recalcó que las definiciones de estratos sociales tienen un umbral abstracto hoy en día.
«Cuando el INE proveía cifras, se veían los estratos bien marcados, pero también la movilidad social de un estrato a otro por medio de la educación y el crecimiento económico del trabajo»
Señaló que esa clase media que ha recibido tantos golpes hoy en día, había tenido una capacidad de ahorro formándose y obteniendo capacidades culturales.
Balza recalcó que el que cambiaba dólares no pensaba utilizarlos para pagar el plomero o dentista, sino un viaje, insistiendo en que ese cambio de objeto de gasto, es un ejemplo que esa clase media siguió «llevando golpes».